Cueva de El Pendo

El Churi, Escobedo, Camargo, Cantabria

Acceso

En la CA-240 (que conecta la N-611 y la N-623), a la altura de la localidad de Escobedo de Camargo, se toma una carretera en dirección al barrio de El Churi. Aquí se encuentra indicada la dirección de la entrada de la cueva, a la que se llega por una estrecha carretera descendente.

Coordenadas geográficas

UTM 30T 426230E / 4804520N – Z: 70

Descripción topográfica

La cueva tiene una amplia boca, orientada al SE, abierta en la parte más baja de una depresión cárstica que actúa como sumidero. Da acceso a un gran vestíbulo descendente que desemboca en una sala de enormes proporciones (80 m de largo por 45 m de ancho y 20 m de altura) donde se ubica el yacimiento arqueológico y un friso de pinturas rupestres. La cavidad termina en una estrecha galería de corto desarrollo. La cueva alcanza 150 m de desarrollo total.

Fecha de descubrimiento

El yacimiento arqueológico fue descubierto en 1878 por M. Sanz de Sautuola, en el marco de sus exploraciones prehistóricas en la entonces provincia de Santander. Los grabados fueron reconocidos en 1907 por H. Alcalde del Río; Las pinturas en 1997 por Á. Valle Gómez, C. González Luque y J. M. Morlote Expósito.

Investigación arqueológica

Tras su descubrimiento, el potente yacimiento arqueológico de la cueva de El Pendo fue excavado por diversos investigadores a fines del s. XIX e inicios del XX: J. Vilanova y Piera, M. Sanz de Sautuola, H. Obermaier, M. Shalcrass, O. Cendrero, etc. En 1907, H. Alcalde del Río exploró la cavidad, descubriendo los grabados del divertículo final. J. Carballo llevó a cabo varias campañas de excavación entre 1924 y 1941, que sirvieron, fundamentalmente, para nutrir de fondos el Museo Provincial de Prehistoria y Arqueología. Entre 1953 y 1957, J. Martínez Santa Olalla dirigió un equipo internacional que practicó las excavaciones de mayor entidad aquí registradas. Finalmente, de 1994 a 1999 trabajó en el yacimiento un equipo dirigido por J. Sanguino González y R. Montes Barquín, propiciando el descubrimiento de las pinturas en 1997. Las ocupaciones documentadas corresponden a cronologías del Paleolítico Medio, Paleolítico Superior, Mesolítico, Prehistoria reciente y Edad Media.

Contenidos artísticos: pinturas, grabados

El arte parietal de El Pendo se distribuye en dos sectores de la cueva: la gran sala y el fondo de la cavidad.

El grueso de las representaciones parietales se despliega en un gran friso ubicado al fondo de la sala, donde se han documentado 24 figuras de animales (en su mayoría ciervas; también un caballo y una cabra) y varios signos, todas ellas pintadas en rojo. Se trata de un conjunto muy homogéneo estilísticamente, situable en una fase arcaica del desarrollo del arte paleolítico (25.000 años antes del presente).

En el estrecho conducto final existe un panel con grabados de trazo simple, fino y único que representan un ave y un cuadrúpedo, de cronología probablemente magdaleniense.

GONZÁLEZ ECHEGARAY, J. et al. 1980. El yacimiento de la cueva de El Pendo (Excavaciones 1953-57). Madrid: Bibliotheca Praehistorica Hispana 17.

MONTES BARQUÍN, R. 2000. Actuaciones arqueológicas en la cueva de El Pendo (Escobedo de Camargo). En R. Ontañón Peredo (coord.): Actuaciones Arqueológicas en Cantabria 1984-1999: 253-258. Santander: Consejería de Cultura y Deporte del Gobierno de Cantabria.

MONTES BARQUÍN, R. y SANGUINO GONZÁLEZ, J. (dirs.) 2001. La cueva de El Pendo. Actuaciones arqueológicas 1994-2000. Santander: Consejería de Cultura, Turismo y Deporte del Gobierno de Cantabria, Ayuntamiento de Camargo, Parlamento de Cantabria.

ONTAÑÓN PEREDO, R. 2018. 10 Cuevas Patrimonio Mundial en Cantabria. Santander: Consejería de Educación, Cultura y Deporte - Gobierno de Cantabria / Asociación de Amigos del MUPAC.